Moneda: Yen Idioma: Japonés
Cada ciudad y país están marcados por su historia, y en el caso de esta ciudad japonesa, un día, una bomba, fue el suceso que la definió e hirió para siempre. Era el 9 de agosto de 1945, a las 11:02 am, cuando cayó la bomba atómica (que, por cierto, no estaba prevista lanzarla ahí, sino en Korura, que por estar nublada, hicieron el cambio de objetivo). Murieron miles de personas y se destruyeron muchos lugares. Por ello es imprescindible recorrer el museo que muestra lo sucedido, pero también recorrer sus calles, jardines y demás sitios de esta encantadora ciudad costera.

Museo de la bomba atómica.


Al hacer el recorrido, comprendes la magnitud del suceso, las consecuencias (en ese momento y a largo plazo) de la bomba Fat Boy que cambió la vida de los habitantes de esta ciudad, la destrucción material y la desolación. Es inevitable sentir una tristeza profunda. Muchas personas colocan tiras de papel entrelazadas, ya que son un símbolo de esperanza y pueden concederte un deseo.

Parque de la Paz.


Es importante dedicar un tiempo a este parque conmemorativo. Ahí está la estatua de bronce con un brazo hacia arriba indicando la amenaza de la bomba, y la otra extendida, simbolizando la paz mundial.

Jardín de Glover. Se puede llegar caminando o subir por un ascensor en diagonal, según el sitio donde te encuentres. En nuestro caso subimos en el ascensor, visitamos todos los jardines, y salimos a una calle repleta de comercios y restaurantes. Además de jardines, hay mansiones (como la Glover) y estatuas. En la entrada te dan un folleto con el recorrido y las explicaciones.
Iglesia católica de Oura. Está construida de madera, el Vaticano la nombró basílica menor (es la única de ese tipo en Japón).
Dejima. Isla artificial construida para aislar a los cristianos y evitar la propagación de la religión. Más tarde fue el centro del comercio europeo.
Barrio chino. Además de holandeses y británicos, hay muchas personas de China que viven aquí, por lo que su barrio es digno de una visita.